Charrasco palmero
Este idiófono raspado está restringido a la geografía palmera, si bien se han observado ejemplares confeccionados por artesanos tinerfeños. En cualquier caso, se trata de una versión de la huesera fabricada en caña y, en muy contadas ocasiones, en madera. Su morfología es bien sencilla. Se trata de una sucesión de 7, 8 o 9 canutos huecos de caña de río (Arundo donax) cosidos en ambos extremos con un hilo de bala, cuerda o cable de metal, cerrándose este en el extremo superior con una cómoda banda de cuero que habrá de adaptarse al cuello del intérprete, y en el extremo inferior con un asidor de cuerda, plástico u otros materiales para facilitar el agarre. Estos canutos de caña se pueden percutir con una castañuela o castañeta afilada o con una sencilla baqueta de caña.